Para prevenir estos peligros a futuro, es importante adoptar hábitos de vida saludables y buscar atención médica regular. Realizar exámenes de próstata periódicos y mantener una comunicación abierta con el médico sobre cualquier cambio en la salud prostática puede ayudar a detectar y tratar problemas a tiempo, reduciendo el riesgo de complicaciones graves. Recuerda, cuidar tu próstata es fundamental para mantener una buena calidad de vida a medida que envejeces.